Septiembre de 1982, los mandos han venido de vacaciones y la 5ª batería está al completo "VAMOS DE MANIOBRAS DE TIRO REAL A CERRO MURIANO". El capitán Nievas García al mando, pero su ultimo mando en la 5ª. Al ser voluntario tenía que aprender algún oficio, iba sirviendo sacas de pólvora y arrimando como artificiero (espoletero). Claro está en una pieza de pocos tiros, en la quinta pieza. No me acuerdo pero a diez tiros ni llegamos. En la sección de cadenas, por la noche para reconciliar el sueño del lunes, después de tanto viaje que mejor que tintorro, de ese de garrafón que traía la cantina de logística, malo pero con un cuarto litro y un par de pitillos te quedabas frito después de silencio, a las 6,30 llamando al personal pera vestirse y formar, el sargento de semana "Bueno", de bueno tenia el nombre hi, hi,. Después de desayunar formación por piezas y a correr por los cerros aquellos, asentamiento y coordenadas para disparar, pero el estampido de mi pieza no se hizo sonar, solo la 1ª Sto. Lozano (la negra), y las colindantes la de Bueno y Varo, terminamos al medio día tranquilos, por la tarde dos asentamientos sin fuego. Regreso al campamento. Al día siguiente crucial, dos asentamientos y nada y el tercero por fin fuego de batería y a comer, por la tarde otros dos disparos más en un solo asentamiento, que guay y una con proyectil fumígeno y espoleta a tiempo con detonación en el aire, un puntazo. Piezas en posición de marcha, dice el capitán Nievas, desde el toa de carga me di cuenta que el amortiguador del segundo eje de la pieza estaba rendido, de momento que hicimos una pequeña parada, lo notifiqué al sargento, el cual no me hizo caso a la primera, pero en el asentamiento piniendo la pieza con la brújula en posición de tiro se fijó y después pidió permiso y al escalón, si lo sé me callo por que los compañeros me dijeron de todo menos bonito. Estaban todas las piezas recogidas y la nuestra intentando sacar la barra de torsión del amortiguador, pero salió y entonces mandó el sargento que nos fuéramos en el toa todos al campamento. Yo me quedé voluntario para que se fuera otro y nos quedamos yo el sargento y el conductor. El sargento no me arrestó por que no podía porque poco agradeció la hazaña y quedé como "jili poyas". Al llegar al campamento menos mal que ya lo tomaron a mejor y nos pudimos reír un rato. El Jueves de tiro cuatro asentamientos y cuatro tiros. Por la tarde me parece que no tiramos la pieza pero corriendo después al campamento, y allí me dieron una "PRC" de mochila y me pusieron al lado del Comandante Don Jaime Vidal, que había que apagar un fuego en la zona de impactos, recuerdo que tropecé con un pepino que parecía que habían hecho dos cascos con el como una manzana, además hubo otro incidente que podía haber sido peor, en la bajada de una loma un "KAISER" se quedó sin frenos menos mal que conducía un veterano y hizo una peligrosa pero certera peripecia y no se comió ni al de adelante y además salvó el camión.
En el campamento nos hicimos unas fotos y después cena y sangría a barba "regada", cogí un borracherón como un piano, y recuerdo que habíamos cuatro dos de la 5ª y uno de la batería de servicios, y otro no me acuerdo. En la fila me tiré un pedo, y se escuchó "anima libre", después fuera de la fila y ciegos perdidos pasó el Sargento Bueno, y nos cuadramos con un tambaleo y una sonrisa peculiar y nos dice... "muchachos parece que estáis bastante privados"... nooo mi sargento hi, hi, hi, . De madrugada me levanté a mear delante de la tienda y se me fue el cuerpo para atrás y caí de espaldas de plancha a la tienda despertando a los compañeros y tiendas vecinas, el imaginaria me vio y se echó a reír. Al día siguiente diana a las 7,30 y de regreso a Sevilla al Regimiento de Artillería número 14.
